Sin advertencia ni aviso, renuncia a su increíble vida de autos, joyas, lujos y caprichos para desaparecer de Buenos Aires con lo puesto. Estamos en 1942 y la prensa propaga la noticia por todo el continente.
¿Qué ha podido suceder para que una estrella de su talla, diva indiscutible en la radio, con contratos millonarios y un futuro cinematográfico de lo más prometedor en Paramount se desprenda de la noche a la mañana de sus bienes y abandone la ciudad sin pronunciar palabra?
El misterio que custodia la huida de La Emperatriz del Tango desata todo tipo de rumores aunque, con la boca pequeña, casi todos opinan que el motivo ha sido una traición.
Tendrá que transcurrir más de medio siglo hasta que un alto directivo de una cadena de televisión en Madrid se pregunte qué habrá sido de la Falcón. El equipo de documentalistas de la casa se pone manos a la obra y descubren que Ada vive, pero está retirada en Salsipuedes, un pueblecito de la sierra cordobesa argentina y no recibe a nadie.
Tan enigmática historia se convierte en el proyecto estrella de la cadena que desplaza en secreto a Buenos Aires a su principal creadora de biopics con el objetivo de lograr que la anciana diva abandone su ostracismo y entrevistarla en exclusiva mundial. Para ayudarla, la productora contrata como asesor al más célebre historiador de tango de la nación.
Ni la cineasta ni el historiador imaginan que, entre giros inesperados y curiosas peripecias, al final la propia Ada será quien dirija la acción.